
¿Qué fue del terror?
¿A quién no le gusta ir al cine a sentir adrenalina?
Al gritar, al taparse los ojos, porque sabes que en cualquier momento algo malo y horrible va a ocurrir, sientes como el vello se te eriza y tienes ganas de salir corriendo de la sala de cine.
Eso es lo que hace con nosotros el buen cine de terror, pero ahora ya no se toma mucho en cuenta el suspenso o las historias que de verdad llamen la atención al público por su innovación, un buen guión o buenas actuaciones, lo de ahora ya son películas llenas de sangre, cuerpos mutilados, exorcismos exagerados y muñecos diabólicos.
El cine de terror surgió de la literatura de este mismo género, donde se extrajo la idea de meter leyendas populares, supersticiones, todo basado en los temores de la gente, tomados de la cultura popular. Los cuentos por otra parte nacieron en la mitad del siglo XVIII; de ahí surgieron los personajes básicos como: los monstruos, fantasmas, brujas, zombies o el mismísimo Frankenstein.
Los escenarios más usados son los cementerios, las casas abandonadas, castillos, ruinas; lugares lúgubres que forman una combinación perfecta con el sonido, creando una atmósfera macabra y atrayendo al espectador a formar parte de la historia. Teniendo como referencia Psicosis (Psycho, 1960), El Resplandor (The Shining, 1980) o Tiburón (Jaws,1975), siendo más famosas por su banda sonora.
El mal, es el protagonista de la película, despertando los más bajos códigos de conducta, moral o bondad. Los personajes principales, que por lo general son todo lo contrario a la maldad, deben luchar contra seres llenos de ira y sed de venganza.
Pero el cine de ahora ha evolucionado tanto, por ejemplo, gracias a las salas de cine en 4D se puede tener una experiencia aún más real, desafortunadamente las historias ya no son nada nuevas y la experiencia no se concreta. Tenemos por una parte el apocalipsis zombie, o el enfermo mental que se alimenta de la gente, o los típicos grupos estudiantiles que llegan a un bosque por diversión encontrándose con un tipo con serios problemas mentales, historias que terminan exterminando a la mayoría de sus personajes y dónde lo único que provoca es risa involuntaria, o asco por los litros de sangre falsa derramada o la asquerosa carnicería.
Otros conceptos interesantes que se han tomado en este género es el “falso documental”, películas grabadas en primera persona sin grandes efectos visuales, donde todo es grabado con una “cámara casera]”, dándole el efecto de realismo buscado y creando una mayor empatía con el publico. Un filme famoso en este rango es El proyecto de la bruja de Blair (The Blair Witch Project, 1999) estrenada en el año de 1999, aunque esta técnica fue originada por la cinta Holocausto Caníbal lanzada en 1979. Y de las que tenemos como resultado ya en años más recientes encontramos a Actividad Paranormal (Paranormal Activity, 2011), REC ( REC, 2007) o Cloverfield, Mounstruo (Cloverfield, 2008).
Muchas otras cintas solo son remakes de películas viejas y famosas en su tiempo, a las que solo les aumentaron más violencia, o incluso modificaron la historia, mejorando los efectos especiales, con esto la iluminación y la banda sonora, pero no todas tienen la ventaja de superar a las versiones originales, de eso depende el gusto de cada persona y por supuesto la visión del director.
Esperemos que el cine de terror retome esas características que lo hacían un género llamativo para el espectador dejando a un lado el Gore comercial. Pero, ¿tú qué opinas?